En estos días hemos cumplido 40 años de la intentona de Golpe de Estado del 23 de Febrero de 1981, conocido por todos como el 23-F. Como pequeña historia de aquél intento fallido llevado a cabo por algunos militares de la fecha, sucedió en Madrid y con un efecto importante en la ciudad de Valencia, donde muchos de los que pudimos vivir aquel día recordaremos con angustia cómo sobre las 18,23 horas un nutrido grupo de Guardias Civiles, al mando del Teniente Coronel Antonio Tejero, secuestraron el Congreso de los Diputados y donde se estaba pendiente de la votación para la investidura del Presidente del Gobierno Leopoldo Calvo Sotelo, las ametralladoras y pistolas de la entonces Guardia Civil sometieron a la soberanía popular a un hostigamiento y menosprecio con tal de eliminar un Gobierno democrático y abanderarlo bajo la consigna del autoritarismo. Es más, aquella misma noche, la ciudad de Valencia estuvo ocupada militarmente bajo el Estado de Excepción por mandato del Capitán General de la Tercera Región Militar, Jaime Milans del Bosch, el cual ordenó a dos mil hombres y cincuenta carros de combate a “pasearse” por las calles de Valencia para dar la verdadera sensación de que el Golpe de Estado estaba ya consumado.
Hablar eso hoy, a los 40 años, para muchos ya es historia, pero para otros es recordar cómo las ilusiones puestas en la democracia y en los valores de la Constitución del 78 se iban al traste. Yo, ese día estaba en Madrid, porque había tomado posesión de un cargo en representación de mi profesión en el Ministerio de Trabajo y me acuerdo cómo al salir para el aeropuerto, entonces de Barajas, el taxista que me llevaba me alertó de que algo ocurría por la Carrera de San Jerónimo y que el tráfico estaba cortado, pero nunca me pudo decir qué es lo que estaba ocurriendo.
Ya en el aeropuerto, la inquietud aumentaba y el silencio y los bulos cada vez eran mayores, pero pude embarcar en el vuelo de vuelta a Jerez Ftra. y ya allí en la radio del coche pude comprobar que la situación era alarmante y que posiblemente volveríamos a perder nuestras libertades. Durante la noche, con el televisor encendido y la radio puesta, pudimos al final comprobar cómo el hoy Rey Emérito y entonces Jefe de las Fuerzas Armadas, D. Juan Carlos I, supo dar un golpe de timón, revestirse de su autoridad como Jefe de las Fuerzas Militares y advirtió que la Constitución era imparable y que no había otro sistema en España más que el que los españoles habían querido tener, pero nunca por la fuerza y bajo la tutela de un Golpe de Estado.
Si aquello hubiese prosperado, posiblemente hoy no estaríamos gobernados democráticamente con elecciones libres, no sólo en el Gobierno de la nación, sino en las Cortes Generales, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y Diputaciones. Es decir, no tendríamos más que un mando único que nos marcase directrices similares o parecidas a la de los 40 años vividos con el régimen de Franco. Es más, nuestras relaciones con Europa no existirían ni estaríamos en la Unión Europea aportando y percibiendo los beneficios de un mercado único ni las libertades que los Tribunales Europeos empaparon a nuestra joven democracia. No tendríamos leyes consensuadas ni votadas libremente y no tendríamos unos tribunales de justicia que bajo la tutela de la Constitución impartieran una Justicia equitativa y libre para que los derechos de los españoles no fueran conculcados. Es decir, cuántos beneficios de los que hoy tenemos estarían cercenados y posiblemente hasta este simple artículo que estoy escribiendo llevaría una censura en la que no podría expresar lo que hoy digo y siento. Por eso nuestro Rey Emérito, Juan Carlos I, habrá tenido errores y habrá cometido presuntas irregularidades que no son fácilmente perdonables, pero no por ello, podemos olvidar que gracias a la Corona y a su intervención en aquel 1981 hoy España posiblemente no se pareciese en nada a lo que hoy tenemos.
No cabe duda que seguimos pese, a la democracia, teniendo dificultades, indeseables que quieren destruirla, anti-sistemas que sin dar un golpe y buscar trabajo saquean en revueltas injustificadas las libertades y propiedades de terceros, separatistas que queriendo dar otro golpe para separarse de España, sí quieren percibir y “chupar” todo lo que puedan a los españoles. En definitiva, no sería nada igual aquél 1981 con este 2021, por lo que desde aquí tenemos que levantar tras esta pandemia el esfuerzo de todos, seguir siendo libres y denunciar las coacciones y situaciones despreciables que algunos, copiando de países como Venezuela, quieren implantarnos, por lo que respetemos a nuestras fuerzas de Seguridad que son las que nos protegen y nos ayudan e incluso, a las Fuerzas Armadas que trabajan para la seguridad y el avance de nuestra patria con catálogos modernos y sistemas internacionales y si es momento convulso para todos, incluso para muchos países democráticos, no desfallezcamos y antepongamos los valores que nos enseñaron para la prosperidad de España. Seguro estoy de que la economía más pronto que tarde se recuperará y seguro estoy que sabremos salir de esta crisis de valores y económica porque las nuevas generaciones que nos pisan los talones querrán esa España libre y democrática basada en los pilares de la Constitución del 78 y que con nuestro Rey Felipe VI, el cual está dando un gran ejemplo de serenidad y tranquilidad, avanzaremos por el surco de la prosperidad. Por supuesto, nos quedan muchas cosas por perfeccionar y la situación política no es hoy clara, pero abortemos con voluntad lo malo que pueda avecinarse y afrontemos con valentía lo bueno que poseemos.
Fdo.: José Blas Fernández Sánchez.
Muy Bueno PEPE BLAS
Muy Bueno PEPE BLAS.
Magnifica realidad. La Constitución es la mejor herramienta para nuestra democracia y aquí se explica muy bien. A estos parásitos que quieren romperla, hay que aplicárselas con Libertad pero sin permitirles que la destrocen. El Gobierno tiene que retractarse de tanta falacia y quitar al antisistema de Pablo Iglesias de ese gobierno social/comunista, pues ya tenemos bastante con los bolivarianos .
👏👏👏Buen resumen, análisis de la realidad y mensaje de esperanza!! 💪💪👍👍🇪🇸
La Constitución es lo mejor que tenemos y ojalá no le metan mano los antisistemas que tenemos en el Gobierno. Ojala que éramos capaces echarlos del sistema que tanto critican pero al que se han agarradao como la garrapata al pelo del perro. Enhorabuena por este artículo D. Jose Blas y por las palabras de esperanza que al final dices.
Pues si D. José Blas, lamentablemente nos toca padecer en estos tiempos que corren otra pandemia de antisistemas, independentistas, okupas y parásitos varios. A ver si tambien somos capaces de sacar una vacuna contra estos virus al igual que se ha sacado contra el covid.
Enhorabuena!!
Si no hubiese intervenido el Rey Don Juan Carlos, hoy estábamos bajo un gobierno militar, sería una lástima pero a algunos coletas de hoy, les hubiese venido bien vivir de esa manera, para que viesen lo que es bueno y no vivir del cuento, pero al resto una vuelta atrás no sería nada beneficioso. Buena reflexión de esta tribuna libre.
A mi entender, un buen artículo con una perfecta radiografía de nuestra España.
Clara descripción de lo acontecido en el golpe del 23 F.
Por otra parte me alegra leer ,viniendo de su pluma,que España podrá superar esta crisis , tanto de valores ,como económica .
Esto , nos da una inyección de ligero optimismo.
Pero tengo mis dudas que se pueda conseguir , con la actual situación política .
Enhorabuena por su artículo !
Fantástico y reflexivo artículo, Pepe Blas, enhorabuena. Ya con nuestra querida España monárquica y democrática poco a poco iremos con la voluntad popular y el poder del voto, eliminando a aquellos que pretenden dividir y cambiar el futuro y el progreso de España.