Raúl Nogales, autor de «A orillas del Aqueronte»: «Todos llevamos un infierno dentro».

Seguro que alguna vez muchos de nosotros hemos estado tentados de pensar que hay alguna fuerza superior que juega con nosotros y nos manipula. Llámese «políticos», acaso «dioses», si uno se retrotrae algo más… El caso es que parece que todo lo que nos pasa no hace sino reforzar ese sentimiento derrotista que nos envuelve y que Raúl Nogales (Madrid, 1974) se ha propuesto cuestionar activamente en su trilogía Némesis, de la que forma parte A orillas del Aqueronte.

¿Cuéntanos alguna manía que tengas a la hora de sentarte a escribir?

Son muchas la que tengo, creo que no tendría tiempo en esta entrevista si las quisiera compartir todas. Sí puedo compartir alguna como, por ejemplo, que rara vez escribo de día. Me siento mucho más cómodo y libre a media tarde, cuando el sol empieza a ocultarse, me gusta escribir en los aviones cuando estoy de viaje y en los hoteles. Básicamente, cuando he conseguido crear o sentirme relajado, posiblemente porque escribir me relaja, y nunca puedo escribir con ropa de calle, siempre lo hago con ropa de estar en casa y siempre descalzo, tiene mucho que ver con la sensación de libertad que me da; sentirme libre es clave para poder ser creativo.

¿Te dicen muchos lectores que se han emocionado con A orillas del Aqueronte?

Gracias a Dios sí. Estoy disfrutando mucho la crítica del lector, estoy disfrutando mucho cómo esa crítica me está siendo transmitida. Estoy disfrutando mucho de haber conseguido, no tanto que el libro guste, no tanto de recibir críticas respecto del estilo de escritura, de la calidad del libro a nivel técnico, sino del punto emotivo con el que la crítica se me transmite. Aposté en todo momento por hacer un libro que no dejara indiferente a los lectores y puedo asegurar que lo he conseguido.

Hay una frase sobre el infierno de Dante que dice «Toda esperanza abandonan quienes acá entran». Como aficionado que eres de su obra, ¿sucede eso también al sumergirnos en A orillas del Aqueronte?

A orillas del Aqueronte es un infierno de esperanza. Es un espacio donde el lector va a repasar sus secretos más íntimos, sus miedos, y se va a enfrentar a ellos. Es un libro que, a pesar del sufrimiento y la angustia que en muchas etapas de su lectura se puede llegar a sentir, algo te obliga a continuar leyendo, porque nunca pierdes la esperanza de encontrar en sus últimas páginas un final feliz.

¿Dirías que todos llevamos un infierno dentro de nosotros? 

Todos llevamos un infierno, todos llevamos un castigo, todos somos culpables e inocentes a la vez y todos, absolutamente todos, estamos obligados a vivir con ello. Las personas seríamos infinitamente más felices entendiendo, asumiendo y gestionando que los miedos y los monstruos forman parte de nosotros y nuestra vida, en vez de evitarlos, esconderlos y no enfrentarlos.

Alguna vez te he leído asegurar que si un día escribes tu biografía, será el final de tu carrera de escritor. ¿Piensas cerrar el círculo así algún día?

No lo sé, sinceramente no lo tengo claro. La única finalidad que podría tener si algún día escribo esa biografía sería crear y compartir el último componente de un legado de historia a mis hijos y, siendo sincero, tendría que evaluar muy bien si esa historia los ayudaría a acabar con sus monstruos o, por el contrario, les iba a crear nuevos.

¿Crees que A orillas del Aqueronte podría llegar a convertirse en un clásico en el futuro?

Creo firmemente y sin lugar a dudas que mi obra en su conjunto ya forma parte de un pasado, está activamente comprometida con el presente y tiene mucho que aportar al futuro. En el caso concreto de A orillas del Aqueronte, disfrutaría mucho si se convierte en un libro de culto.

¿Qué mensaje te gustaría trasmitir a través de A orillas del Aqueronte?

Estamos viviendo momentos complicados para la sociedad, se habla mucho de los derechos, pero poco de las obligaciones, y precisamente en A orillas del Aqueronte uno de los temas principales son las obligaciones, son las responsabilidades y los sacrificios que uno debe llevar a cabo para poder disfrutar de ciertos y determinados derechos, y lamentablemente casi siempre vas a tener que llevar a cabo la batalla del sacrificio en un campo de juego como visitante, totalmente agresivo e incluso posiblemente y en muchos casos injusto.

Me llama la atención que la mayoría de las historias que tiran de episodios mitológicos siguen recurriendo, en abrumadora mayoría, a los mitos griegos. ¿Qué tienen estos para seguir siendo tan ilustrativos aún hoy, a pesar de otros grandes ejemplos como los egipcios, japoneses, hindús o mesoamericanos?

La mitología griega es apasionante, seguro que como cualquier otra referencia de las que citas. En mi caso concreto, creo que me resulta más sencillo identificar en la mitología griega recursos con los que poder crear paralelismos que hoy en día son actualidad, tanto políticos, económicos o sociales, y eso me da mucho juego creativo. Al fin y al cabo, la trilogía Némesis no deja de ser la representación mitológica de cómo los dioses juegan con los humanos, tal cual los políticos intentan hacer con la sociedad.

¿Cuántos libros sueles leer de media al año?

Soy un gran devorador de contenido. No sabría decirte exactamente cuántos libros, porque muchos de ellos, sobre todos libros técnicos, no los leo al completo y he cambiado mucho los hábitos de lectura y consumo de información. Leo mucho artículo, entrevistas, me he aficionado mucho a los documentales y a los podcasts. Literatura como tal, posiblemente esté leyendo unos tres o cuatro libros al año.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *