El primer caso de Unamuno | Luis García Jambrina

Una de las novedades más interesantes que nos ha llegado el presente mes es esta novela policíaca y de misterio que tiene como principal reclamo a su protagonista: nada más y nada menos que el escritor Miguel de Unamuno, tan famoso por su talento con las letras como por su fuerte carácter.

La acción transcurre en Boada (Salamanca) en 1905, donde Unamuno se verá mezclado en una serie de crímenes y, motivado por ayudar (y de paso poder emular las aventuras de Sherlock Holmes), hará equipo con un abogado y una misteriosa mujer.

Un punto que destacaría es la ambientación: un entorno rural crudo en el que abundan las injusticias y se hace más probable que se tome la justicia por su cuenta, lo cual da un toque más impredecible a los acontecimientos. Tiene un componente de denuncia histórica al tocar el tema de la España vaciada y la inequidad territorial.

El misterio central es fácil de seguir, no se enreda innecesariamente y tiene un claro cierre en la trama, autonconclusiva aun con potencial de convertirse en serie. En cuanto a su protagonista, la impresión que da es de ser bastante fiel al carácter del Unamuno real: algo cascarrabias, con sus ambigüedades y, ante todo, su inconformismo e incapacidad de estarse quieto ante las injusticias. Él mismo ofrece pinceladas de crítica social y pinta un interesante retrato de la España rural, sin descuidar el componente de novela negra.

También ofrece una interpretación en clave de ficción de la famosa Teresa que intitula una de
las obras de Don Miguel. Unamuno promete ser un gran personaje literario y este ha sido un buen comienzo. Lo he pasado bien viendo a este señor metido en una trama detectivesca y, como bien dicen, con el tiempo hay personajes de ficción que llegan a sentirse igual o más vivos que su creador.

Planta:

Chumbera (Opuntia stricta): víctima de una plaga reciente en España, nadie las defendió ni se aplicaron programas para salvarla porque están consideradas una especie invasora. Pero en el pasado quitaron mucha hambre a los españoles en los pueblos gracias a sus frutos. Probablemente Unamuno tendría una opinión firme al respecto.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *