Cuentos Macabros. Volumen I |Edgar Allan Poe

Antología de relatos de Poe, recoge en este primer volumen alguna de las historias más macabras del autor estadounidense, y todas ellas exquisitamente ilustradas por el ilustrador y autor francés Benjamin Lacombe.

Hablar o analizar a Poe, es hacerlo de uno de los autores más talentosos e influyentes de Estados Unidos y todo un clásico de la literatura universal. Sus historias rezuman melancolía, soledad y quizás algo de frustración por una vida que se niega a darnos lo que más anhelamos, y que, si nos lo da, nos lo arrebata de forma hosca y dolorosa.

La vida de Poe, cual fuese una de sus historias, fue turbulenta desde su nacimiento hasta su muerte, rodeada de misterios, de alcoholismo, de altibajos anímicos que bien marcaban su obra literaria, y sin embargo aquellos que lo conocían hablaban de que en su rostro taciturno siempre parecía aflorar un amago de sonrisa.

Las historias que contiene el volumen cuenta son Berenice, El gato negro, La isla del hada, El corazón delator, La caída de la Casa Usher, El retrato oval, Morella y Ligeia, además de una biografía de la mano de otro gran autor: Charles Baudelaire, y la extraordinaria pluma en la traducción de Julio Cortázar.

A pesar de que todas las historias son de por sí y cada uno de ellos, auténticos clásicos universales mis preferidas como lectura fueron: El gato negro, El corazón delator y La caída de la Casa Usher. Estas tres historias me han parecido de lo más perturbadoras, inquietantes e incomodas en muchos momentos.

En El gato negro podríamos incluso encontrar cierto paralelismo entre el autor y el protagonista que se deja arrastrar por las garras estrechas del alcoholismo y que acaba obsesionado con un simple gato negro, revertiendo sobre él toda su furia y crueldad, y perdiendo el sino hasta límites inquebrantables. 

El corazón delator es la historia de un asesino y de su crimen, a priori perfecto. Sin escatimar en detalles, Poe se lanza a una grotesca y perturbada descripción en primera persona por parte del asesino. La locura está presente desde el momento en el que el protagonista afirma no estar loco, y aun así un simple ojo con cataratas le arrebatará su débil cordura, perpetrando un horrible crimen. Pero algo ocurre ajeno a la voluntad del asesino, la voz de la culpabilidad se eleva a través de los latidos que todavía se oyen de la descuartizada víctima. 

Nuevamente Poe logra crear una ambientación densa e incómoda con una historia que brilla en su sencillez, y que valiéndose de su prodigiosa pluma crea una de los relatos más conocidos de la literatura.

La caída de la Casa Usher, tiene un estilo más cercano a la novela gótica británica que a la emergente literatura americana, sin duda el estilo gótico del autor lo acercan más al otro lado del atlántico. En este relato Poe vuelve a jugar en el limbo de la cordura de sus protagonistas, la muerte vuelve a estar presente a través de un prematuro deceso que acelerará de forma tétrica y fantasmagórica la caída de una casa familiar, los Usher.

En definitiva, leer a Edgar Allan Poe es adentrarse un mundo oscuro y lleno de atrocidades que nos rodea, pero que parece mantenerse al margen de nuestras ajetreadas vidas, Poe nos recuerda que estas historias están ahí, les dio luz en la oscuridad y nos la trajo para arrancarnos un escalofrío con el pasar de las páginas. Poe consiguió lo que muy pocos, convertir sus obras en clásicos intemporales, usando para ello una prosa culta y delicada que aparentemente acuciaba su decadencia en esa época. Definitivamente, no fue el caso. 

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