Javier Fornell
La celebración del Día de Reyes en España es una de las tradiciones más entrañables y esperadas del calendario festivo. Esta costumbre, que culmina el ciclo navideño con la entrega de regalos a los niños el 6 de enero, tiene sus raíces en una rica combinación de historia, literatura y simbolismo religioso. Pero, ¿quiénes fueron realmente los Reyes Magos? ¿Cómo se transformó su historia en un mito popular? Y ¿cuáles son las claves que han consolidado esta celebración en España? En este artículo exploraremos los orígenes históricos y literarios de los Reyes Magos, su impacto en la cultura española y la creación de una tradición que aún hoy despierta la ilusión de millones de personas.
Los Reyes Magos en los Evangelios: Contexto bíblico
La primera referencia a los Reyes Magos aparece en el Evangelio según San Mateo, el único de los Evangelios canónicos que menciona a estos personajes. En el capítulo 2 de este texto, se narra cómo unos “magos” provenientes de Oriente siguieron una estrella hasta Belén para adorar al recién nacido Jesús. Aunque el texto no especifica sus nombres, número o lugar exacto de origen, el relato describe cómo estos visitantes ofrecieron tres regalos simbólicos: oro, incienso y mirra.
El término “magos” (μάγοι) ha generado numerosas interpretaciones. Originalmente, en la cultura persa y griega, esta palabra se refería a sacerdotes o sabios especializados en astrología y otras ciencias ocultas. Esta referencia ha llevado a muchos estudiosos a vincular a los Magos con los sacerdotes zoroástricos, quienes tenían un profundo conocimiento astronómico.
Evolución de la imagen de los Reyes Magos en la tradición cristiana
Con el paso del tiempo, la figura de los Magos fue enriquecida por tradiciones apócrifas y culturales. Durante los primeros siglos del cristianismo, se consolidó la idea de que los Magos eran tres, probablemente debido a los tres regalos mencionados en el Evangelio. En el siglo V, el Papa León I afirmó que representaban a las naciones gentiles que reconocían a Cristo como el Salvador.
A partir del siglo VIII, comenzaron a difundirse sus nombres: Melchor, Gaspar y Baltasar, cada uno representando a una de las tres razas humanas conocidas entonces. Melchor era descrito como un anciano europeo de cabello blanco, Gaspar como un joven asiático y Baltasar como un hombre africano. Esta representación simbolizaba la universalidad del mensaje de Cristo.
Los Reyes Magos en la literatura medieval y renacentista
La Edad Media fue un período clave para la difusión del mito de los Reyes Magos. Textos como el “Evangelio Armenio de la Infancia” y las “Historias de los Magos”, atribuida a Beda el Venerable, elaboraron con gran detalle la leyenda. En estos relatos, se describía no solo su viaje guiado por la estrella, sino también episodios de su vida posterior, como su conversión al cristianismo y su martirio.
El arte y la literatura medieval también contribuyeron a consolidar la imagen de los Reyes Magos. En la “Leyenda Dorada” de Jacobo de la Vorágine, una de las compilaciones hagiográficas más populares del medievo, se narra una versión enriquecida de la historia, describiendo cómo los Magos regresaron a sus tierras para difundir el mensaje cristiano.
En el Renacimiento, los Reyes Magos continuaron siendo un tema recurrente en la literatura y el arte. Poetas como Lope de Vega y autores como Calderón de la Barca incluyeron referencias a ellos en sus obras, subrayando su papel como figuras de devoción y generosidad.
El nacimiento de la tradición moderna: Regalos y cabalgatas
La celebración del Día de Reyes el 6 de enero tiene sus raíces en la fiesta de la Epifanía, que conmemora la manifestación de Jesús al mundo gentíl. En la península ibérica, esta festividad se popularizó durante la época visigoda, cuando los Reyes Magos comenzaron a ser venerados como símbolos de unidad y fe.
Con la consolidación del cristianismo en España, el Día de Reyes se integró plenamente en el calendario litúrgico. Durante la Edad Media, era común que se celebraran representaciones teatrales llamadas “autos de Reyes”, que recreaban la visita de los Magos al Niño Jesús. Estas escenificaciones, cargadas de simbolismo religioso, también incluían elementos populares y festivos.
La tradición de intercambiar regalos el Día de Reyes tiene sus primeros vestigios en la costumbre medieval de dar presentes a los niños como una forma de recordar los obsequios de los Magos. Sin embargo, fue en el siglo XIX cuando esta práctica se institucionalizó en España, influenciada por el auge de la literatura infantil y las transformaciones sociales de la época.
La primera cabalgata de Reyes de la que se tiene registro tuvo lugar en Alcoy, Alicante, en 1866. Este evento, concebido como un espectáculo para niños desfavorecidos, se convirtió rápidamente en una tradición que se extendió a otras ciudades de España. Las cabalgatas, con sus coloridos desfiles y la participación de los tres Reyes, simbolizan la llegada de los Magos y su distribución de regalos a los niños.
Los Reyes Magos en la cultura popular contemporánea
En la actualidad, los Reyes Magos siguen siendo una figura central de la Navidad en España y otros países de tradición hispánica. Desde libros y películas hasta canciones y anuncios publicitarios, su imagen está profundamente arraigada en el imaginario colectivo. También han surgido reinterpretaciones modernas de su historia, adaptándose a los cambios culturales y sociales de cada época.
La figura de los Reyes Magos y la celebración del Día de Reyes en España son el resultado de siglos de tradición, transformación y adaptación cultural. Desde su origen en los relatos evangélicos hasta su consolidación como emblema festivo, los Magos representan no solo la devoción religiosa, sino también los valores de generosidad, unidad y familia, en los que la ilusión de los más pequeños se traslada a los adultos.