Aitana Larrinaga
Como cada semana, vengo a hablaros un poco de una de mis grandes pasiones, la literatura. Pero esta vez no voy a reseñar uno en concreto, ni a contaros la cantidad de pendientes que tengo o todos los que salen estos meses.
Simplemente os quiero contar algo de lo que hace tiempo me vengo percatando. Ayer fui de paseo a La casa del Libro y como no, no pude salir con las manos vacias. Uno de ellos en concreto, que salió a principios de mes bajo una editorial de peso. El caso es que cuando cogí el libro, que valía nada más y nada menos que 18€, la calidad de la cubierta era nefasta. No hablo de si me gustaba la portada o no, ni de la calidad de las hojas, ya que las hay más finas o más gruesas. Sino de la cubierta y sobrecubierta. Parecía papel de fumar.
Mi amiga me preguntó si era un caso aislado y le contesté que no. Efectivamente, tengo todos los libros que ha publicado la autora y todos ellos carecen de la calidad a la que estoy acostumbrada. Y me da rabia, ya que no es un autopublicado del que podría entenderlo, ni siquiera una persona a la que acaban de darle la primera oportunidad. Tiene más de 10 libros y todos son iguales. Y mi pregunta es, ¿por qué editoriales de tanto peso y fama no se gastan un poco más en la calidad de sus productos? ¿Es que pagamos poco por los libros?
¿Qué opináis?