Marisol Cabrales Sánchez
Hoy traigo una novela que gustará a los amantes del misterio y realismo mágico con un toque gótico y
estrafalario que recuerda al estilo de Tim Burton.
Nos cuenta las peripecias de dos personajes, alternando entre Clod Iremonger y Lucy Pennant. Clod es
un miembro importante de la rarísima familia Iremonger y Lucy una joven que es llevada a trabajar
como asistenta para dicha familia.
Los Iremonger tienen 2 grandes peculiaridades: su mansión se encuentra bordeada por pilas de basura y
cada miembro de la familia recibe, nada más nacer, un objeto de uso cotidiano que tienen que cuidar de
por vida. De lo contrario, algo muy malo puede ocurrirles. Para añadir un punto más de rareza al asunto,
dichos objetos emiten sonidos que sólo unos pocos miembros del clan pueden oír, siendo Clod uno de
ellos.
Es una novela agradable de leer que no escatima en incluir detalles macabros y que emplea con
frecuencia el humor y la ironía para tejer una historia que trae una sorpresa tras otra. Su punto fuerte es
la imprevisibilidad de la trama, fruto de lo extraño de su propuesta, y lo especial que es el ambiente que
logra crear a nivel tanto de escenario como de personajes.
Cuenta con ilustraciones obra de Carey, cuyo estilo le va como anillo al dedo a esta historia. La edición
está muy cuidad, incluyendo mapas de la mansión en las contraportadas.
Lo único que veo mejorable es la protagonista, Lucy. Tiene unas reacciones caprichosas y temerarias,
resultándome menos elaborada que Clod (el cual tampoco es demasiado complejo). Hay que tener en
cuenta que el proyecto está concebido como una trilogía: su historia no solo queda abierta, también se
abren más interrogantes que no recibirán respuestas hasta libros posteriores.
Planta:
Poto (Epipremnum aureum): al igual que el objeto asignado a Clod, no es vistoso, pero es resistente,
cómodo de tener y fácil de cuidar.