Es estos días estamos acudiendo a estadísticas tendenciosas donde desde el Gobierno nos vienen engañando con el número de parados que se registran en las oficinas de los servicios públicos de empleo, donde nos dicen que hemos bajado en 27.027 el número de desempleados en octubre, lo que supone un -0,9 en relación al mes anterior, aludiendo que el buen comportamiento del sector servicios y de la agricultura son los autores de que vayan disminuyendo los desempleados y que en estos momentos nos encontremos con 2.914.892 parados, lo que conlleva que estamos ante una bajada muy importante para mirar con optimismo las cifras que en nuestro país se vienen dando desde antes de la pandemia.
Como logro importante nos participan que los contratos indefinidos se multiplican por más de tres, y que en octubre se registraron 1.529.139 contratos, un 19,5% menos que en el mismo mes del 2021. De todos ellos, 697.335 fueron indefinidos, cifra que equivale al 45,75% del total de contratos efectuados en el mes y que supera en más del triple a la de octubre de 2021.
Esta embriaguez de números, visto desde la perspectiva aritmética, tenemos que tomarlo con muchísima cautela, pues para llegar a ello hay que decir la verdad y por qué son esos números los que tenemos que tragarnos como si el desempleo en España fuese camino de la desaparición, cuando quienes manejamos directamente los contratos en las empresas y asesoramos jurídicamente a quienes llevan a cabo sus contrataciones, tenemos que decir toda la verdad de este montaje. Por tanto, vamos a empezar por relatar que los fijos-discontinuos que no están trabajando no se contabilizan como parados, sino como demandantes no ocupados (DENOS), porque estos y por mandato del Ministerio de Trabajo no están contabilizados en las estadísticas del paro registrado, la cual publica el SEPE como Servicio de Empleo Público Estatal, no declarando con toda realidad esa medida sacada de la manga para decir que el fijo-discontinuo es un tipo de contrato indefinido, que tiene un carácter estacional y que contempla posibles periodos de intermitencia, es decir, tienen ventajas de contrato indefinido, por tener una mayor indemnización por despido que un contrato temporal y además argumentando que los fijos-discontinuos que no están trabajando y que están en periodo de inactividad se contabilizan como ”demandantes no ocupados”. Lógicamente, el querer ocultar a los fijos-discontinuos para que no entren entre los parados es jugar sucio y engañar a quien lleva a cabo las estadísticas y a quien las lee. Y claro, el resultado final es que todos esos miles de trabajadores no contabilizados no figuran como nada, cobran el desempleo, pero no se les admite como parados, lo que pone de manifiesto que decir que el desempleo ha bajado es mentir compulsivamente. Pero hay otro caso que no se contabiliza, que es la falta de creación real de empleo, porque con la decisión de esa reforma laboral que por un voto erróneo ha salido adelante y ya veremos el resultado de esa votación, vemos a diario que los contratos indefinidos se están haciendo por manojos a tiempo parcial, para que en definitiva el coste que puedan tener las indemnizaciones o los premios de antigüedad se reduzcan considerablemente y no hablemos de la vuelta que se le ha dado al periodo de prueba de los trabajadores, algo que antes de la mini reforma no tenía el menor aprecio, pero que ahora han subido un 900% la extinción de la relación laboral durante dicho periodo y además dentro de la ley que no es otra que el propio Estatuto de los Trabajadores.
Cada día que pasa desde la reforma, nos damos más cuenta que las estadísticas que publica el Ministerio de Trabajo sobre el desempleo están cada vez más maquilladas y, por tanto, llamarle fijo al que es fijo-discontinuo y no tenerlo en cuenta entre los desempleados no es más que una falacia para engañar al que no sabe y para mirarse al espejo y engañarse así mismo que es lo que en definitiva está llevando a cabo quien tiene la cartera en el Ministerio de Trabajo.
En resumen, los trabajadores que están percibiendo el desempleo tienen que estar en las listas de parados. Distinto es cuando sean dados de alta, pero engañar en el sentido de quitar de las estadísticas del paro a tantos miles de trabajadores es decir con la boca chica que el paro en España está aumentando y que hemos superado con creces los tres millones de parados, pero por llamarse “fijo” con el apellido de “discontinuo” es jugar como un trilero y engañar a diestro y siniestro.
Fdo.: José Blas Fernández Sánchez.
Esto no tiene arreglo. Estamos en un entorno de mentiras de todo tipo y ya te asusta nada de lo que escuchas y lo que lees. Todo es mentira y sobre todo en la política. Enhorabuena por el artículo Pepe Blas. Un placer leerte.
Una más… es como hacer trampa jugando al solitario. Pero tranquilo el CIS de Tezano dice que todo va bien.
!!! Que pena de tener un gobierno que engaña y en especial en este caso del número de parados a esta ministra impresentable que no le importa el paro que ya es más de tres millones cien mil , sino su ego y sus mentiras pues cree que en España solo hay analfabetos que se creen sus mentiras. Que ganas tengo de verlos ya en su casa junto al embustero mayor del Reino como es Sanchez, escondidos y abucheados por España entera. En definitiva esto de los fijos discontinuos que no se tengan en cuenta cuando perciben el desempleo es de poquísima vergüenza Dña Yolanda. !!! Dimita ya!!!
El artículo clarísimo y bien argumentado, pero tenemos delante a unos tileros capaces de todo
Hay un grupo de música pop, que tiene una canción que dice así.
Cuéntame un cuento y verás que contento me voy a la cama y tengo lindos sueños.
Pues eso hace este gobierno contar cuentos sin el más mínimo escrúpulo.
Una vez más un muy buen artículo. Gracias.