Lydia | Mis Lecturicas
David Orange nos presenta su segundo libro, “Romperás la noche con un grito”, una novela en la que la trama principal bailará alrededor de la desaparición de un bebé, pero estará repleta de diversas subtramas que hipnotizarán al lector mientras está sumergido en este libro.
Esta novela ha causado furor entre los amantes del género, y no es para menos, ya que consigue mantenerte con intriga desde la primera página hasta la última, dejándonos boquiabiertos con todo lo que ocurre y sobre todo, con los “móviles” de cada acción.
Hoy, David, se acerca a nosotros no sólo para hablarnos de su libro, si no también, para que lo conozcamos a él.
Antes de comenzar, cuéntanos quien es David Orange
Un apasionado del arte de contar historias y un enamorado de la intriga, el suspense, el cine y la literatura. Alguien con una inquietud infinita por seguir aprendiendo, conociendo y compartiendo aquello con lo que disfruto.
¿Qué es para ti escribir? ¿Qué supone?
Es muchas cosas, pero ante todo, es una forma de ordenar mis propios pensamientos y sentimientos. Disfruto escribiendo, pero también que necesito a nivel personal. Es terapia y es diversión. Viajar a otros mundos y vivir otras vidas. Cuando no escribo siento que me falta algo, que no soy yo mismo. Así que, como ves, escribir para mí va mucho más allá de ganar dinero o reconocimiento, es algo tremendamente personal.
¿Tienes algún ritual de escritura? Es decir, alguna “manía” a la hora de sentarte a crear.
Las manías surgen con el tiempo, con la edad, con las circunstancias. Ahora mismo estoy muy pendiente de la postura que adopto al escribir, de que sea la correcta, de que la pantalla sea grande y permita ampliar bien la letra. También me gusta el silencio y aislarme todo lo posible. Pero como digo, las manías en mi caso van y vienen. Ha habido veces en las que me gustaba leer los últimos capítulos de la novela antes de ponerme a escribir, otras solo el último, depende del momento. Ha habido veces que me gustaba levantarme a las cuatro de la mañana, tener la sensación de sueño, de esfuerzo, de sacrificio. Eso me hacía dar un poco más de mí.
¿Cómo surgió “Romperás la noche con un grito”?
Entiendo la construcción de una novela como un proceso en continuo movimiento cuyo punto de origen es difícil de determinar, principalmente porque cuando miro hacia atrás lo que observo es una mancha difusa y abstracta que puede que abarque muchos momentos en el tiempo. Es difícil de explicar, pero por ejemplo, en Romperás la Noche hablo de la infancia, de su influencia en la creación del yo, de la identidad, y eso es algo en lo que llevo pensando de un modo u otro desde hace muchos años. También hablo de un secuestro y la investigación policial que trae consigo, algo en lo que, del mismo modo, también llevo pensando (a modo de idea inquietante) también desde hace mucho tiempo. Así que, esta novela surge del resultado de muchos pensamientos, ideas y experiencias, tanto delante como detrás del teclado o del televisor.
En él, además, cuentas una historia bastante dura, pero con varias subtramas que permiten una gran crítica social. Antes de empezar a escribir la historia, ¿ya querías que fuese así, o fue surgiendo?
La construcción de la trama principal y de las subtramas estaba organizada desde un inicio. Había cosas que quería contar y sobre las que quería hablar y la historia gira en torno a ellas, no obstante, hay multitud de detalles y matices que han ido surgiendo en el día a día, los personajes y la propia historia te lleva por caminos que no esperabas y a los que ni quieres ni puedes renunciar.
Como es tu último libro, te pido que le digas a los lectores de La Alternativa porque crees que deberían leerlo.
Porque pienso que es una novela trabajada al milímetro para llegar al interior más profundo de los lectores. Se ha trabajado en ella desde el respeto y el amor a la literatura, y porque creo sinceramente que van a sentir emociones y sensaciones que los van a liberar durante un tiempo del día a día.
Tienes otro libro, “La chica del semáforo y el hombre del coche”, cuéntanos algo de él.
Es una historia completamente diferente que habla de las consecuencias de todo cuanto ocurre a nuestro alrededor. Esa sería la idea principal, pero la historia sigue a una pareja de policías que persigue a un asesino en serie a quien todos conocen como “El hombre del coche”. Por otra parte, tenemos a un genio de las matemáticas que cree poder adelantarse a lo que va a pasar mediante una serie de algoritmos matemáticos. Creo que es una historia muy atractiva y que también aporta muchas cosas diferentes.
¿Cuánto has tardado en escribir cada uno de tus libros?, es decir, desde el momento en el que escribes la primera palabra, hasta que dices, “fin”
El manuscrito original de mi última novela tardé en escribirlo alrededor de cuatro meses y medio. Pero ahí no cuento el tiempo de preparación previo ni el que vino después, que fue sin duda el más largo. El proceso entero duró alrededor de dos años, el más largo de todos en los que he trabajado. En mi anterior novela, dicho proceso fue más corto, el manuscrito original lo escribí en unos tres meses y el proceso entero duró entre un año y año y medio.
Y… ¿Cómo te sientes la primera vez que ves tus libros, en físico, en tus manos?
Es una experiencia extraña, pero sin duda muy bonita. Tocas el libro y sientes una pequeña sensación de irrealidad, como si no fuese de verdad o no fuese tuyo. A día de hoy aun cojo alguno de mis libros con ciertas reservas, como un objeto extraño que ha surgido de mi cabeza y ha cobrado vida propia, ¿Qué locura, no? Jeje.
Hoy por hoy, las redes sociales juegan un papel muy importante en todo (por suerte o por desgracia), ¿Cómo crees que benefician (y también afectan) a los escritores y a sus libros?
Las redes sociales, desde mi propia experiencia, benefician más que afectan. Creo que es una forma de potenciar y de fomentar la lectura que difícilmente se haría por otros medios. Le dan una publicidad y una difusión que facilita que a cualquier persona (lectora o no), pueda llegar la información o reseña de casi cualquier libro. Como digo, mi experiencia no puede ser mejor.
En mi caso, mi reseña hacia tu libro, “Romperás la noche con un grito”, fue buenísima, porque así lo merecía, ya que me gustó mucho (si los lectores quieren leerla, les animo que vayan a verla), pero, ¿Cómo os afectan las reseñas negativas, aquellas que, en muchos casos, os critican duramente, no solo al libro, si no también, a los escritores?
Creo que una reseña negativa hay que verla siempre de una manera totalmente abierta y libre de prejuicios y de malos royos. Todo el mundo es libre de opinar y de tener sus propios gustos. El problema es cuando hay gente que se toma a mal ciertas críticas y, también, cuando hay “ensañamiento” con algún libro. Creo que se pueden decir las cosas sin ofender. A mí particularmente, cuando me llega una crítica negativa, trato de aprender de ella, me anoto en rojo todo aquello en lo que creo que podría mejorar sin renunciar a ser yo mismo. Siempre he visto esto como un juego, como algo divertido, no un motivo para enfadarse o enfrentarse a nadie. Creo que no me verás nunca discutir con alguien a quien no le ha gustado mi libro.
Haznos un spoiler, ¿tiene David Orange un nuevo libro en el horno?
Sí, uno en el que estoy trabajando más que nunca y con la mayor ilusión por un proyecto que he tenido nunca. No escribo si no estoy plenamente seguro de que puedo ofrecer algo nuevo y distinto, algo de lo que me sienta orgulloso. El proyecto en el que estoy trabajando lo siento así, más que nunca, pero no puedo decir nada más. Al menos de momento.
Para ir despidiéndonos, te voy a pedir lo que a todos los escritores que han pasado por aquí, dale un consejo a todas esas personas que le gusta escribir, pero no se animan a hacer el sueño realidad de ver sus obras en manos de los lectores.
Que por favor no desesperen. La vida da muchas vueltas y con trabajo y perseverancia todo llega. Que no tengan miedo a mejorar, a seguir progresando y trabajando, a probar cosas nuevas y a encajar las críticas que hagan falta. Pero sobre todo, que no se olviden nunca ni de disfrutar ni de recordar por qué escriben.
Ahora ya si, a modo de despedida, dinos tu cita favorita del mundo, esa frase que te encanta, tu lema.
Disfruta de cada día como si fuera el último.